Pastel de jamón y queso

Esta es una receta muy sencilla y además apropiada para los meses estivales. A los niños les encanta.

INGREDIENTES (4 personas)

Aprox 200 gramos de jamón York cortado en láminas gruesas
Aprox 200 gramos de queso gouda, edam, mozarella etc cortado en láminas
Pan de molde 
Leche
Mantequilla
Un molde de aluminio de unos 22 cm

La realización de este pastel es bastante empírica así que las cantidades de ingredientes que os he proporcionado son estimativas.
Lo más importante es hacerse con un molde de aluminio o de silicona de unos 22 cm de diámetro - lo que viene a ser un plato convencional - de unos dos o tres centímetros de alto. Son muy fáciles de conseguir en cualquier supermercado.
Untáis el molde de mantequilla - no es necesario en el caso del molde de silicona -  y empezáis a disponer las láminas de jamón en forma de estrella.  Parte de la tira de jamón servirá para hacer los lados del pastel y para rematarlo. Para que la forma de colocar el jamón quede clara he hecho un dibujo :


Las formas rectangulares rosadas representan el jamón y deben cubrir totalmente la base, incluso superponiéndose.
Una vez habéis completado la base, colocáis encima las láminas de queso, procurando que ocupe la totalidad de la misma. Seguidamente cubrís con el pan de molde sin corteza que previamente habréis remojado rápidamente en leche. Esto se hace para que al hornear el pastel no se resquebraje.Ya hemos completado el primer piso. A continuación añadimos otra capa de queso en lonchas y otra de pan remojado en leche. Probablemente ya no podáis añadir más pisos, por lo que ahora la parte de las lonchas de jamón que sobresalían las cerráis hacia el interior. De nuevo una capa de queso y otra de pan para rematar el pastel. 
Precalentáis el horno a 100 grados y con diez minutos será más que suficiente para que el queso funda y el jamón adquiera un tono tostado.  Se saca del horno y se deja enfriar a temperatura ambiente. Luego se lleva a la nevera y al día siguiente simplemente lo volcáis con cuidado en una fuente para desmoldarlo. Lo podéis decorar con mahonesa aunque es una de esos platos que desaparecen sin necesidad de añadirle nada más.